Los castillos de Escocia han encerrado siempre cientos de leyendas. El Castillo de Glamis está considerado como el castillo más encantado de Europa, probablemente por su relación con el rey Macbeth. Habitado por la familia Lyon, entre sus inquilinos destacó la reina Madre, que pasó su infancia en el castillo. Por otro lado, el Castillo de Dunnottar se consagra como la gran fortaleza que controla el Mar del Norte.